Cuando de aventura se trata, sin lugar a dudas Guatemala sigue siendo un buen referente para aquellos que buscan vacaciones de ensueño. Son incontables las historias inolvidables que se puede vivir en esta pequeña sucursal del cielo.
Ubicado a 400 km de la capital al occidente del país, en el departamento de Huehuetenango. Estas maravillas ofrecen toda una gama de diversión para propios y extranjeros. Los Cenotes de Candelaria son todo un atractivo natural de aguas azul turquesa. Según los historiadores La palabra cenote viene del término Maya d´zonot, que significa: caverna con depósito de agua y eran utilizados por los Mayas como centros ceremoniales incluso se hacían ritos de sacrificio. Actualmente mantienen su carácter de lugar sagrado por los habitantes de su alrededor. Pero ello no impide que pueda disfrutar de sus aguas cristalinas.
Compuesto por dos cenotes, estos atractivos acuíferos alcanzan profundidades de hasta 30 metros. Aunque el acceso a este lugar es algo complicado, curiosamente esto lo hace más atractivo para aquellos que les gusta la exploración. No hay mejor lugar para escapar del bullicio de la ciudad y gozar de una inmensa paz y tranquilidad. La opción de quedarse es suya ya que puede acampar y disfrutar de una noche mágica en este lugar.
Y si la adrenalina es parte de la diversión cerca de los Cenotes de candelaria se encuentra El Cimarrón, que también es un cenote pero seco. Con diámetro aproximado de 170 metros y con una profundidad de aproximadamente de 150 metros es ideal para los amantes de la escala, aunque cabe mencionar que se le describe como peligroso por lo que se requiere de cierto nivel de profesionalismo para descender al espeso bosque que mora en sus profundidades.
No olvide llevar ropa ligera, linterna, agua para hidratarse, alimento suficiente y sobre todo un botiquín de primeros auxilios, ya que es un lugar recóndito,
Guatemala te espera ven y a conocerla, te aseguro que ya no te querrás ir.
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